Han pasado 15 años desde que el primer libro de Harry Potter salió a la venta y poco más de 13 años desde que comenzó el fenómeno cinematográfico y que sirvió como punta de lanza para que se diese a conocer aún más el trabajo literario de J.K.Rowling, escritora inglesa y creadora de este mágico y maravilloso universo.
De los 15 años de existencia de esta saga literaria, tengo 12 años como fan y poco más de 7 años en donde me he metido de lleno al mundo Pottérico y no es sino hasta ahora que me he sentado a pensar y al mismo tiempo a escribir un poco sobre lo que es el fandom Potter.
y ¿qué es? Para muchos ya es una forma de vida, para otros un momento importante en sus vidas, un periodo de tiempo en el cual se vivieron muchas cosas y para otros tantos ha pasado sin pena ni gloria. No se trata sólo de libros, es importante hacer enfásis en el papel que las películas jugaron para que la franquicia creciera y se convirtiera en lo que ahora se ha convertido (una mina de oro para Warner Bros.), el sostén económico de su escritora (no me digan que The Casual Vacancy mantendrá a Rowling, por favor) y un material de culto para sus aún fieles seguidores.
EL PROBLEMA:
No es que se tenga que ser fiel a una sola saga o a una sola cosa, pero intentar crear cosas a partir de algo como “Harry Potter” o realizar inevitablemente comparaciones entre esta saga y otras, es el primer error que como fans o “FANS” se ha cometido.
Si vemos al fandom desde un punto de vista antropológico y social, entenderemos que son un grupo de personas con un gusto en común en el que se intenta o pretende llevar más allá de los relativamente "imaginable cualquier tipo de afición. Específicamente hablando, los grupos Pottéricos o clubes de fans son y han sido la ruta perfecta de escape de todas las personas que leyeron los libros de Harry Potter o vieron por lo menos alguna vez en su vida una de las películas y quedaron fascinados con la historia, efectos, personajes y buscaron la forma de ir más allá y conocer más sobre este gran universo de magia para poder comprenderlo, entenderlo y al mismo tiempo, ser entendidos.
¿Entendidos? ¿Cómo? Aunque no lo crean, muchas de las personas que pertenecen u/o pertenecieron a este tipo de agrupaciones, tuvieron en sus vidas una serie de episodios de marginación y soledad que pudieron canalizar directamente con la historia del famoso niño mago que se vio “marginado” por una sociedad “muggle” por ser mago, empezando este tipo de marginación desde su núcleo familiar.
No quiero decir que esto sea 100% real para todos los casos, pero si les puedo asegurar de que es un tema conocido para un gran porcentaje y que gracias a los clubes Pottéricos pudieron sacar adelante estos “rezagos sociales” y pudieron ver la vida de otra forma en el momento en el que fueron aceptados tal cual eran y formaron parte de una sociedad “igualitaria”.
Es por ello que también fueron entendidos, por que no tenían por que rendir ninguna clase de cuentas a nadie por ser o comportarse de un modo, por comportarse o vestirse diferente o incluso por tener un preferencia sexual distinta. Todos tenían/tienen sus pros y contras, pero jamás serían juzgados por ello; sin embargo esto no quiere decir que sea todo color de rosa, como en toda sociedad, por pequeña o grande que sea, conlleva a muchas cosas, entre ellas la rivalidad entre las personas, los roces y la creación de más grupos pequeños con más gustos en común que sólo Harry Potter. Pero esa es otra historia.
El problema en si, es que como justamente seres individuales sentimos la ferviente necesidad de estar con aquellos que nos hacen sentir bien y nos dejan algo positivo (aunque sólo sea por un momento) y comenzamos a canalizar todas las emociones y sentimientos en aquellas personas con las que tenemos gustos afín y estos gustos pueden ser desde una serie de televisión, hasta por las mascotas. En cuanto al fandom Pottérico se incluye una variante muy importante y es: los libros. Gracias a Harry Potter los fans saben que la lectura es fundamental y trascendental en sus vidas, convirtiéndola en una forma de vida y un hábito muy común y respetado.
Después de Harry Potter este hábito debía seguir siendo alimentado y continuado, por lo que buscaron la forma de llenar el vacío “existencial” post Harry Potter siguiendo una línea “mágica” en las novelas que se leían y que casi forzosamente debían ser sagas.
Surge Twilight. Saga que sale a la luz en el 2005 y que curiosamente se empieza a dar a conocer en el 2007 y más aún con su película en el 2008. Digo curiosamente por que justo eso que menciono en el párrafo anterior sobre “llenar el vacío existencial” surge con esta saga y sucedió justamente al finalizar la publicación de libros de Harry Potter.
The Hunger Games. Igualmente se publica en el 2008 y apenas hasta el 2010 comienza su auge más intenso y posterior realización cinematográfica.
Ahora que ya mencioné dos ejemplos muy característicos, retomo lo que mencioné al inicio de EL PROBLEMA.
El problema (o al menos, mi problema) no es que se deba ser fiel a Harry Potter por el resto de la vida, el problema es que intenten los mismos fans de Harry Potter pertenecientes a grupos o clubes, crear grupos o sociedades “Twilighters” o “Tributes” con la misma temática o línea que se llevaba a cabo en los clubes Potter.
¿Por qué? porque no es lo mismo reunirte en X lugar para pretender crear Hogwarts (con todo y lo extremistas que son los fans) y jugar con una varita para simular que haces magia a reunirte para jugar a ser vampiro y/o hombre lobo y pelearse a muerte o por el contrario, reunirte para de igual forma, pelear a muerte por ser el tributo de tu distrito emulando los sucesos de The Hunger Games.
Me ha tomado 6 años crear reuniones, juegos, actividades, activaciones y un sin fin de cosas por Harry Potter y es el momento en el que digo “pese a que ya hemos hecho muchísimas cosas, aún no he terminado de explorar ese mundo y de sacarle todo el potencial al universo creado por Rowling.
Y me he tomado el tiempo de pensar en actividades para Twilight e incluso participé en un evento (para ayudar a una amiga, debo aclarar) y no es que mi aberración hacía la saga me lo impida, pero me parece realmente complicado pensar en algún juego o actividad que no sea necesariamente competencia entre un grupo licántropo y otro vampiro.
Todo lo que he pensado siempre ha derivado en sangre, pelea, muerte.
Y para The Hunger Games. Debo admitir que tiene más jugo esto porque si bien la competencia es y debe ser a muerte, puedes pensar en muchas cosas que pongan obstáculos y problemas para llegar a un objetivo, aunque nuevamente el resultado es el mismo que el anterior: debe derivar todo en muerte.
No como tal, ni en el más estricto sentido de la palabra, sino que pienso:
Ok, puedo crear una actividad cualquiera entre vampiros y hombres lobo en la que invariablemente van a enfrentarse y necesariamente debe haber un ganador, pero la única forma de perder es muriendo (aunque sea sólo en el juego) y ¿tu personaje? y ¿el seguimiento a la línea temporal? puedo iniciar un nuevo juego y puedo seguir siendo el vampiro u/o hombre lobo Abraxam, pero se pierde todo sentido de tiempo y espacio, es como jugar al serpientes y escaleras, siempre seré la ficha amarilla, pero una vez que logre un objetivo empezaré de cero y puedo ser la ficha roja o negra o con un poco de suerte podré ser la amarilla de nuevo.
¿Me explico?
Esto no lo tiene Harry Potter a menos que juegues a ser Voldemort y todos sabemos cuál será el destino, igualmente que si nos ponemos a jugar con al personaje de Sirius, James, Lupin, Tonks, etc, etc, etc. Pero eso no pasará por que aún cuando es un rol pertenecer a un club de fans, nadie tiene el nombre y personalidad de ningún personaje de la saga, todos son independientes, son seres individuales con un sobrenombre y no importará nunca a qué se juegue, siempre serás el mismo personaje y la misma persona, por que será imposible cambiarnos a menos que estemos fuera por completo de ese club y por lo tanto de ese juego de rol.
No hay perdida de tiempo y espacio por que si se juega a estar en Hogwarts como estudiante siempre seré Abraxam, si se hace una actividad en el callejón Diagon, siempre seré Abraxam, si me voy al Ministerio de Magia para buscar la profecía, siempre seré Abraxam y mi personaje morirá en el momento en el que yo lo decida, en el que yo quede fuera y lo desintegre.
El punto es que no tengo que reiniciar el juego, ni jugar sin jugar, sino que todo es continuo y el escenario puede cambiar e incluso podemos irnos de viaje por el tiempo y todo será exactamente.
¿Qué puede hacer un Twilighter al respecto? y ¿un tributo?
Puedes constituir al personaje y siempre ser el mismo, pero será inevitable competir y “matar” a tu personaje, para competir nuevamente con el mismo personaje en otro juego.
Haciéndolo monótono, circular y vicioso.
No digo que en las actividades Potter no exista la muerte, esta el Avada Kedavra y es tan penado en HLM como en la saga, pero es usado en momentos en específico, no como una forma continua del juego.
Mi problema no es que se reúnan ni vivan como se les venga en gana sus gustos y sagas, mi problema es que no le encuentro el sentido, sobre todo cuando parten de elementos tan elementales de los grupos Pottéricos que pueden ser una burda representación de aquello a lo que pertenecieron y lo hacen con otro nombre y otra historia.
Sería divertido e interesante si se le integrasen más elementos, pero ni las mismas sagas se prestan para ello, por que tienen muchísimas cosas pre establecidas que no dan tiempo a meterle más cosas, sin caer en lo que menciono, en un circulo vicioso y monótono.
Pero así es… el fandom Pottérico ha evolucionado y lo ha hecho como Pokémon, para empeorar, puesto que entre los mismos grupos Potter han surgido más y más grupos que lejos de honrar a la saga, sólo hacen que los que somos fans realmente parezcamos fanáticos de pacotilla y por su culpa nos estigmaticen a todos y nos ridiculicen.
Cabe mencionar que es una entrada que tenga nombre y firma, hablo en general por todos que conozco tanto de México como del mundo y que muy a mi pesar, todos son iguales, con sus respectivas excepciones, por su puesto.
Pero ya lo he dicho como cierre de muchas de mis entradas y en esta ocasión no será la excepción.
En gustos se rompen géneros y supongo que mientras exista alguien que les haga segunda, eso seguirá pasando y por lo tanto, existiendo. ¡Que viva la libertad de expresión!
“Tomate la molestia y hazlo perfecto”
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