lunes, agosto 29, 2011

De los arrepentimientos…

En alguna entrada comenté hace mucho tiempo que sólo me he arrepentido de algunas cosas en mi vida, ciertos momentos y circunstancias que deje pasar a conciencia y que después de un tiempo esta misma conciencia me paso la factura y me hizo sentir mal.

Al día de hoy…. y después de algunas horas de reflexionar sobre TODO lo que ha sido de mi vida en estos 21 años, sigo en lo mismo. No hay nada de que arrepentirme.

He hecho tantas estupideces he querido, algunas cosas más malas que otras, pero quisiera que me diesen su definición de “malo”, por que puede que su definición y la mía, no sean la misma, así como también he hecho cosas muy buenas que me han dejado con la espina por pensar que pudo ser mejor…

La verdad es que tanto lo bueno, como lo malo siempre te deja algo grato, aunque el sabor amargo de las malas situaciones perdure y aunque sea en ciertos momentos un poco injusta la vida, creo que estoy bien y contento con lo que tengo y con lo que he hecho.

He vivido tantas cosas con tantas personas, más sin embargo no quiere decir que lo haya vivido todo, me han faltado algunas experiencias que vivir y aún me restan más, pero a mis 21 años, he estado y he hecho lo que he querido y con quien he querido.

Mi rato de ocio-reflexión surge luego de que hablaba con Monty y Nash sobre lo que ha sido de nosotros desde que nos conocimos hasta la fecha, por lo que hemos pasado y por lo que no pasamos, en fin, todo lo que involucra… y llegamos a la conclusión de que nos gustó tanto y la pasamos tan bien, con TODOS sus pros y contras, que no nos arrepentimos de nada. La vida con los bohemios fue casi tan buena, como tan mala, pero puedo decir que tengo más recuerdos agradables, que desagradables… fuimos muy felices, muy idiotas y tuvimos muchos, pero muchos momentos que realmente no cambiaria por nada y si volviese a nacer, los volvería a vivir.

No sé que concepción tengan los demás bohemios al respecto, pero de nuestras últimas platicas, hace ya mucho tiempo, coincidíamos en lo mismo…. y aunque las cosas han cambiado radicalmente, espero que todo aquello que hicimos, bueno y malo, sea no un trago amargo o la piedra en el zapato, sino una etapa más de nuestras vidas en la que afortunadamente, estuvimos los que teníamos que estar.

Estoy en mis ratos de recuerdos y renovación jajajaja tenía que decir lo feliz que soy y recordar también lo estúpidos que solemos ser en ciertos momentos…. misma estupidés que recordamos con dulzura.

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