El trabajo es trabajo…

La verdad es que yo no sé que afán tiene la gente por menospreciar las actividades y/o trabajos de las demás personas y especialmente el mío.

Desde hace muchos años que trabajo, he podido empalmar mis estudios y un trabajo, con todo y lo difícil que resulta esta labor y no tengo ningún problema con ello. Actualmente no estudio y créanme que no es por el placer de dejar la vida universitaria, sino por que simplemente no se me da la oportunidad, llevo dos años en estas circunstancias y lejos, pero muy lejos de llegar a ser placentero, es algo que me causa mucha frustración y enojo, pero bueno, ese no es el punto.

El punto… es que si, soy barista, preparo cafés, sirvo alimentos, me divierto demasiado y me encanta lo que hago. Mi mente no logra concebir cómo es que para algunos otros esta clase de trabajo pueda ser “menos”, el trabajo es trabajo y punto, hay dinero de por medio, hay un servicio que ofrecer y prefiero estar así a quedarme haciendo nada o en la espera de que el Espíritu Santo me ilumine y me de un pase a la universidad.

No me ofende ni me enoja que se hagan burlas al respecto, que se haga un comentario despectivo o que se comente con desagrado y lo comento por que así trabaje como policía o recogedor de basura o algún otro oficio, igual es trabajo y sé que por esas personas hay “seguridad” en la Ciudad (se dice) o podemos caminar por calles limpias o en mi caso, puedo mantener a estudiantes, oficinistas, mensajeros, etc, etc, etc, felizmente despiertos y a gusto con una taza de café.

Por ahí me dijo una profesora hace muuuchos, pero muchos años: “No importa lo que hagas en tu vida y de tu vida, lo que realmente importa es que lo hagas bien y siempre trates de ser el mejor” y eso hago…